El territorio amazónico produce ilusiones a propios y extraños. Su inmensidad provoca delirios, prejuicios, quimeras, desde los viajeros extremeños que pusieron el pie en el bosque hasta estos días con recetas sobre el progreso y el desarrollo. En este contexto, de las ilusiones, el Estado ha impulsado la creación de áreas naturales protegidas con buenas intenciones, pero que se quedan en papel mojado que perjudica a las poblaciones y a los recursos naturales del lugar por sus omisiones. En ese sentido, hemos querido conocer que hay detrás de la gestión de un área protegida como ha sido la del Alto Nanay- Pintuyacu- Chambira.
El Área de Conservación Regional Alto Nanay – Pintuyacu – Chambira, tiene una superficie de novecientos cincuenta y cuatro mil seiscientos treinta y cinco hectáreas y cuatro mil ochocientos metros cuadrados (954 635,48 ha), está ubicada en el distrito de Mazan y Alto Nanay de la provincia de Maynas y en el distrito de El Tigre de la provincia de Loreto, en la región de Loreto, de acuerdo a su norma de creación.
Entre los considerandos de la creación de esta ACR resaltaban la conservación de parte de los bosques húmedos tropicales de la selva baja norperuana y de la “Ecorregión Bosques Húmedos del Napo”, una de las ecorregiones más ricas del mundo en especies por área y en endemismos.
Amén de esta declaración normativa de la ACR, hay integrantes de la «floristanía (la ciudadanía de la floresta o de la ciudadanía bosquesina)» que se juegan la piel por sus ideales ante los problemas que se viven en el día a día. Uno de ellos es Kenny Hualinga, biólogo de formación y una de las pocas voces que clama y reclama indignadamente desde el bosque medidas a favor de esta ACR, aquí una reseña de la entrevista.
¿Cuáles son los principales problemas de la ACR Alto Nanay- Pintuyacu- Chambira?
El principal problema es el abandono del Estado. Se tiene un millón de hectáreas de bosque, casi un millón hectáreas de flora, que ha estado olvidada por el Estado, simplemente, es una figura legal donde no se ve la presencia del Estado. No solo es el bosque, hay comunidades que están olvidadas por el Estado, y más aún, se suma el gran problema de hoy es la minería ilegal que viene desde el 2016 hasta la fecha. Han pasado cinco años y la minería ilegal sigue enquistado en el Alto Nanay. Recordar que la minería ilegal trae otros tipos de problema adicionales a ello como son los tema sociales: trata de personas, violaciones a menores de edad, drogadicción, venta de drogas… todo esto a causa de la minería ilegal.
¿En qué medida la institucionalidad estatal, en sus diferentes instancias, responde a los problemas identificados en la ACR Alto Nanay- Pintuyacu- Chambira?
La respuesta de las instituciones del Estado ha sido muy pasiva. O no son muy efectivas hasta el momento. Han pasado más de cinco años y aún la minería ilegal sigue en el Alto Nanay. Es un claro ejemplo que el trabajo del Estado no es eficiente o no es lo suficiente para eliminar o erradicar este problema de la minería ilegal que existe en la cuenca. La minería ilegal trae la venta de drogas, hay trata de personas, explotación de menores, violaciones a menores y otros problemas más. Existe tanta corrupción que las cosas siguen igual o peor. Es más, En un promedio de dos a tres días ingresan entre diez a 15 kilos de mercurio a la cuenca del Nanay, en motonaves fluviales o «pongueros» ¿Se pueden dar una idea de cuantos kilos de mercurio está ingresando a la zona?, ¿Quién está supervisando, quien está fiscalizando eso?, ¿Quién hace esta vigilancia que esto no puede ingresar a un área natural protegida? Ingresan productos prohibidos hasta en los botes peque- peque que van a las comunidades como equipos, incluso, mercurio de tres a cinco kilos en cada bote peque- peque. Esto es lo que está ocurriendo. Desgraciadamente, las cosas están así.
¿De acuerdo a tu experiencia cuáles serían las medidas más urgentes y prioritarias a adoptar en esta ACR?
Lo primero es que las autoridades competentes se pongan a hacer su trabajo. Cumplir con sus funciones. Desde las instancias regionales que deben coordinar con las otras instancias. No es posible que a la cuenca del Nanay ingrese el mercurio con total facilidad, esto no es posible si están haciendo su trabajo.
Otra medida es que las comunidades deben ingresar proyectos productivos de corto, mediano y largo plazo, donde las comunidades vean un futuro. El Nanay tiene muchos potenciales: en el tema forestal, en los recursos de flora. Tiene potencial para trabajar mecanismos de reproducción de servicios ecosistémicos, agua, paisaje entre otros recursos. Las comunidades necesitan actividades y desarrollo. Necesitan servicios básicos como educación, salud. Necesitan empleo y las comunidades están siendo olvidadas. No están siendo atendidas.
El Estado tiene que invertir, inyectar fondos y no lo está haciendo. En el mes de mayo salió el segundo estado de emergencia en la cuenca, sin embargo, los responsables de este estado de emergencia de las diferentes instancias se lavan las manos y el tema del Nanay sigue igual. Va un mes del estado de emergencia, pero no se ven los resultados. No se ve ninguna acción contra la minería ilegal ni a favor de las comunidades.
Otro tema que no debe olvidarse es la participación de la población. La población y las comunidades son claves para ayudar a erradicar esta actividad de la minería ilegal en la zona. Estamos viendo demasiada corrupción, fraude, al momento que se hacen las intervenciones. Las autoridades están interviniendo, pero no están dando a conocer. Los decomisos de oro, mercurio, dinero y no sabemos a donde están yendo estos. Ante esto necesitamos que haya vigilancia ciudadana, que las comunidades acompañen estos procesos para que estas cosas no estén pasando.
Hace unos días acabamos de ver una intervención en el Puesto de Yarana, hay testigos que señalan que han visto sacar una mochila con mercurio. Sin embargo, en el parte fiscal no figura la presencia de la mochila de mercurio. Comentan que hubo cien metros de manguera de cuatro pulgadas, no figura ni un metro de manguera en las fotos que nos han facilitado ¿Dónde están estos bienes? Por eso necesitamos urgente vigilancia ciudadana, vigilancia de las comunidades. Que estén ahí y que se articulen con las autoridades y que también las autoridades comunales estén presentes en estas acciones.
Por las denuncias ¿has recibido amenazas de muerte?
Durante el año 2018, 2019 hacia ingresos a la zona que está fuertemente golpeada por la minería ilegal como Pucaurco, Diamante Azul, San Juan de Ungurahual, Salvador Pava, todavía ingresaba a la zona. En uno de mis últimos ingresos recibí amenazas de muerte por los «dragueros». Me amenazaron con un arma blanca, diciéndome que le dejara trabajar o que van a tomar otras acciones. O que me baje de la comunidad y que ellos trabajen porque no tengo nada que hacer allí. Si he recibido amenazas de muerte. Los defensores del ambiente sufrimos estas amenazas. No es un trabajo que te asegura la vida, pero es un trabajo que te da paz y tranquilidad. Luchar por los derechos humanos, por la vida, por un ambiente sano te da esa valentía y esas ganas de seguir continuando, pese a que nuestra vida, la vida de nuestras familias están en riesgo y amenazas. He recibido amenazas a través de terceros, por mi trabajo de conservación. «Ahí viene el chismoso, el que da datos de la comunidad y no lo queremos ver por aquí, le vamos a plomear», eso es lo que les dicen. También amenazas con fines de corrupción, me ofrecían dinero para callarme y no decir nada. Para dar información sobre los operativos. Querían silenciarme con dinero, pero no han podido lograr. Como podían hacer callar querían pagar a un sicario para matarme, quinientos soles era el precio por mi cabeza. Pero el trabajo continúa y vamos a seguir luchando.