La desorientación cognitiva que sufrimos los peruanos y peruanas no nos permite afrontar el presente y futuro con las lecciones aprendidas, como se observa de este presente incierto, lleno de cortapisas, inflamación de brotes autoritarios como imitar a Bukele, frágil institucionalidad que se puede palpar en la escena nacional en sus diferentes espacios regionales y locales. Una de las características de esa desorientación es la falta de memoria histórica, estamos educados para vivir el hoy. El concepto lo ha desarrollado la historiadora peruana Carmen Mc Evoy, definición que nos permite comprender mejor lo que ocurre en el escenario nacional. Hace pocos días se ha cumplido veinte años del Informe de la Comisión de la Verdad y Reconciliación (CVR) sobre sucedido en la época de la violencia política de los años ochenta y noventa –como muchos peruanos he sido testigo de ese sufrimiento. Fue un trabajo para tratar de entender lo que ocurrió esos años teñidos de sangre y violencia, asesinatos a sangre fría, de personas desaparecidas y ejecuciones extrajudiciales, de vivir en la incertidumbre cotidiana que acrecentó el autoritarismo que todo peruano o peruana llevamos dentro. Por todo esto y más, la ciudadanía peruana debería, deberíamos hacer un esfuerzo para leer y discutir ese informe, sería una suerte de terapia de lo ocurrió ¿Por qué ganó la violencia?, ¿Entenderíamos la furia asesina de Sendero Luminoso, SL (recordemos que SL fue un producto peruano)?, ¿Sabíamos en la selva el genocidio de los asháninka de parte de SL? ¿Qué pasó con las recomendaciones de la CVR, estas se implementaron? Lo ideal sería verbalizar lo que ocurrió de cara al obsceno centralismo, al brutal el racismo, al machismo, la homofobia –recordemos el incidente en una discoteca Las Gardenias en Tarapoto donde asesinaron a homosexuales de parte del MRTA bajo el concepto de limpieza social. Así entenderíamos mejor lo que ocurrió y enmendaríamos los errores. Desgraciadamente, poco hemos aprendido como prueba tenemos las muertes de 49 personas por protestar con una Presidenta de la República ciega para leer al país –llama la atención que la autoridad regional de Loreto y el Alcalde de la ciudad Iquitos, se hayan plegado rápidamente a ella sin hacer ascos ni reparos ¿Será la falta de memoria? En este lado de la Amazonía ni siquiera hemos hecho un alto para reflexionar sobre el Informe de la CVR, sabemos que la deslavazada memoria de los amazónicos y amazónicas viene desde lejos, seguro que estamos metidos en otros apremios del presente. Por todo ello, es importante ejercer el derecho de la memoria histórica para no volver a repetir lo que hicimos mal. En este sentido, de la memoria, es de felicitar a la Radio La Voz de la Selva con la iniciativa de «Relatos en pandemia» que tiene por finalidad recordar lo que pasó y sí es posible enmendar lo mal que lo hicimos. En esta misma dirección, hace poco una abogada alegaba el derecho de los deudos de conocer e identificar dónde estaban los restos de sus seres queridos fallecidos durante la pandemia porque las autoridades miran a otro lado. Lectoras y lectores, hay mucho trabajo para ejercitar la memoria.
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